Principios y fundamentos

Es un principio organizativo de los Paquetes de Trabajo que utiliza identificaciones únicas basadas en unidades de información de fácil acceso. Sepa mas...

Este concepto se refiere al enfoque de gestión de proyectos, particularmente útil en proyectos complejos o innovadores que requieren iteraciones continuas para desarrollar el alcance del proyecto.

La idea central es que, en lugar de intentar definir todo el alcance del proyecto desde el principio, el proyecto se divide en partes más pequeñas o “cajas negras”, cada una de las cuales puede desarrollarse e iterarse de forma independiente. Estas “cajas negras” se aplican a los diferentes niveles de la Estructura de Desglose del Proyecto (WBS), permitiendo que cada componente del proyecto sea desarrollado, probado y mejorado de forma iterativa.

Este enfoque reconoce que la incertidumbre y el cambio son inherentes a proyectos complejos e innovadores, y proporciona un marco flexible que puede adaptarse a las necesidades cambiantes del proyecto y del entorno. Al mismo tiempo, el uso de “cajas negras” ayuda a mantener la organización y la estructura, asegurando que todas las partes del proyecto estén alineadas con los objetivos generales.

Se trata de fenómenos caracterizados por una interferencia que inadvertidamente se valora como consecuencia de la procrastinación, culminando en un impacto desproporcionadamente mayor de lo inicialmente previsto. Estas burbujas son una amenaza potencial para la progresión efectiva del proyecto.

Es un estilo de planificación dinámico que reacciona activa y continuamente al proceso de seguimiento y control, permitiendo la adaptación funcional a posibles desvíos de ruta o cambios de ritmo. Se refiere a un enfoque flexible para lograr los parámetros definidos en los objetivos del proyecto independientemente de las circunstancias cambiantes.

Es una técnica de planificación a corto plazo con un procedimiento secuencial lógico que emplea principios basados en LEAN para crear un cronograma de actividades semanales. Este enfoque integra la disponibilidad de recursos y las capacidades de los equipos, permitiendo definir parámetros ejecutivos de manera objetiva y asertiva. Sepa mas...

Estos son los puntos donde existen intersecciones entre métodos ágiles y métodos predictivos en metodologías híbridas. Representan interfaces de integración entre diferentes métodos y herramientas para permitir la comunicación sistemática del proyecto.

Es una mentalidad de gestión de proyectos que se basa en la idea de que, una vez que se define el alcance y se han completado todas las actividades predecesoras, simplemente espere a que el entregable comience a ejecutarse y se completará. Sepa mas...

Es una herramienta analítica utilizada para evaluar la respuesta conductual de un proyecto o metodología a los cambios. Este diagrama gráfico ilustra la correlación entre cambio, que es el impacto del cambio aplicado al proyecto, y adaptación, que es la modificación del proyecto en relación a su alcance original, resultante del cambio implementado.

Es una técnica de evaluación fundamental que tiene como objetivo garantizar la funcionalidad de un EAP. Esta técnica evalúa la estructura bajo tres espectros distintos: comportamiento, eficiencia e integridad, cada uno de los cuales proporciona una validación única y complementaria para el análisis de la estructura del proyecto.

Se trata de un análisis y revisión sistemáticos del alcance, plazos, costos y otros parámetros de planificación para garantizar que sean viables y estén alineados con las estrategias del proyecto. Este proceso implica una evaluación continua de todos los aspectos de la planificación para garantizar que los objetivos del proyecto puedan alcanzarse dentro de los límites establecidos.

Se trata de un comportamiento o dinámica de trabajo donde la planificación se realiza analizando y calculando la solución a un problema en función de una perspectiva futura, y no solo de la situación actual. Analizar un problema en función de la situación futura implica tener en cuenta los cambios que pueden ocurrir en el entorno del proyecto. De esta forma, es posible medir los efectos de la solución en el momento de su aplicación. Este enfoque proactivo permite al planificador anticipar desafíos, identificar oportunidades y desarrollar estrategias efectivas para lograr los objetivos del proyecto. Calcular la solución del proyecto en función de la situación futura es una habilidad que requiere un conocimiento profundo del proyecto y del entorno en el que se ubica. Esto implica la capacidad de predecir las consecuencias de las acciones y adaptar las estrategias en consecuencia. Por ejemplo, si una solución propuesta podría conducir a un resultado indeseable en el futuro, el planificador del proyecto puede modificar la solución o desarrollar estrategias para mitigar el impacto negativo.